Drácula (2014): La historia que JAMÁS debió contarse

   Aunque no fuera una de las películas de la cartelera actual que me llamase especialmente la atención, auspiciado bajo la recomendación de su visionado por un par de colegas, Hunterfox uno de estos, decidí darle una oportunidad a esta “película”, que aún teniendo el listón bajo como lo tenía… Sigue siendo una tremenda MIERDA INDISOLUBLE, que puede provocar vómitos, sarpullidos y diarrea, en unos días (por masoca que soy) creo que me veré “Exodus”, y algo me dice que me devolverá estos sentimientos encontrados con “Drácula”. Paso a hablaros sobre la película, pero no sin antes decir: “Hunter, majo… ¡TE ODIO!”

   El reinventar cuentos, historias o personajes clásicos es ya un recurso típico en el mundo del cine, más especialmente en estos últimos años de sequedad mental que parece sufrir Hollywood, lo han hecho con los grandes del cine de terror, con los cuentos más clásicos (recordemos “Maléfica”), y parece que era el momento propicio para una nueva versión del vampiro por excelencia. Al verla no tenía ni idea de nada, ni actores, ni guionistas, ni director (quienes resulta que son primerizos)… Ni siquiera me había visto el tráiler, de hecho, me atrevo a decir que la vi esperando que me gustase, por el simple hecho de que Hunter parece pensar que me meto con las cosas que me recomienda por gusto… ¡Pero es que este despropósito no hay por dónde cogerlo!

   Partamos del hecho de que intentar que alguien que empalaba a sus enemigos pueda parecer buena persona, es complicado… Uno imagina que los guionistas pasarán este detalle por alto… ¡Pero no! Según la película lo hacía a modo de lección para el resto, empalar “a unos pocos” para que el resto no se sublevase, muy lógico todo. Otra cosa que puede llegar a descolocar un poco de primeras es el hecho de que exista un vampiro en una cueva y decidas ir a verle con dos colegas porque sí. Una vez allí, a la primera de cambio, según empiezan a caer… ¡Sales por patas! Es gracioso cómo un par de escenas después se lamenta por sus colegas caídos, cuando le sobran segundos para poner los pies en polvorosa en cuanto se les acerca el monstruo a estos.

Campo de batalla... ¡Mi flequillo!

   Pasemos a hablar de los INTERESANTES personajes de esta película:

-          El malo: Es malo, líder turco, parece un gitano de barrio, es malo, hace maldades, y es muy malo. Le puedes encontrar por la calle de relaciones públicas de cualquier discoteca gay.

-          La mujer: Está buena, aparece con corsés y canalillos que facilitan las vistas, tiene los diálogos más estúpidos del mundo. Tiene tetas bonitas que había que enseñar. Además, es rubia.

-          El hijo: Es pequeño, es imbécil, le pone ganas, es MUY imbécil, a raíz suya se produce el enfrentamiento y no por ello deja de ser el personaje más prescindible.

-          El monstruo: Es feo, tocaba que fuera feo para ser monstruo, tiene la voz tocada porque tocaba también, el pack incluye: uñas asquerosas, ropa de cortesana desgastada y gusto por los acertijos. También es malo, no le va mucho lo de dejar leer la letra pequeña de los contratos.

-          El prota: Es guapo, es bueno, está en forma, tiene un sentido del honor que no hay por donde cogerlo, con su abdomen puedes limar piedras, se convierte en superhéroe de la Marvel al hacerse vampiro. Próximamente le quitará el puesto a uno de los Vengadores en la nueva peli’.

   En definitiva, la película es horrible… Podría hacer una entrada de 10.000 palabras hablando sobre lo mala que es, pero no merecería ni la pena. Desaconsejo totalmente el visionado de esta, y espero que el rumor que hay por la red de que pretenden hacer un grupo “a lo Avengers” pero con los monstruos clásicos, sea sólo un rumor, porque si apesta por separado, en una cuadrilla de bichos, no quiero ni pararme a pensarlo. No quiero despedirme sin mencionar unas cuantas joyazas que tiene la película:

-          El hijo ve a su padre con el mono de sangre, y le lleva un presente envuelto en un paño, “porque le ve mal”, una vez desenvuelto el fardo, nos encontramos con… ¡Un puto mendrugo de pan! Y para más INRI, va el jodido niño y se come la mitad, además de imbécil, gocho.

-          El bueno es bueno (y por eso le quiere su pueblo), el malo es malo (y por eso te tiene que caer mal), la mujer es mujer (y por eso enseña carne), el hijo es hijo (y por eso tiene que ser un puto mocoso sin importancia)… Y los diálogos son acojonantes ya.

-          ¡La cantidad de CGI que tiene la película desde el primer momento! Cuando el prota sube la montaña no hay plano donde no se “recorte” su perfil con un fondo hecho por ordenador.

-          La mujer cae de 128737654327649832102 pisos y al caer, no sólo sigue de una pieza, sino que tiene líneas de diálogo adicionales.

-          La escena de “Drácula” contra el ejército enemigo entero… Ni el puto Hulk, vamos.

-          El GRAN líder militar que es el enemigo, que venda los ojos de todas sus tropas para que no teman lo que no pueden ver (a Drácula)… ¡Lo que yo temería serían las hostias de mis compañeros! ¡Un ejército ciego, por Dios!

-          Introduces, y de mala manera a todos los personajes que no tienen importancia, y te dejas en el aire al “esbirro” de Drácula. BIEN.

 

Drácula 2014... Toma, pa' ti.

   Y así podría seguir hasta el hartazgo… Lo dicho:

1. No os la veáis. No, en serio... Ni por curiosidad, ni por saber si es así de mala, NO LA VEÁIS.
2. No hagáis caso de las recomendaciones de Hunter, el muy cabrón se pasa de gracioso. Buenos días.